La intervención realizada en este edificio forma parte de una actuación global de rehabilitación orientada a la mejora de la eficiencia energética, la accesibilidad y el confort residencial. Se ha instalado un ascensor eléctrico sin cuarto de máquinas en ambos portales, y se ha ejecutado una nueva escalera metálica, eliminando así las barreras arquitectónicas y facilitando el acceso universal.

En paralelo, se ha llevado a cabo la renovación completa de la envolvente mediante un sistema de aislamiento térmico por el exterior (SATE), mejorando notablemente el comportamiento térmico y acústico del edificio.

Esta transformación no solo eleva el valor funcional y patrimonial del inmueble, sino que lo convierte en una opción residencial actual, eficiente y alineada con los estándares de habitabilidad y sostenibilidad urbana.